1. Johan Anthòni Pérez i Herrero “En Johan Chritófol Bertomeu i Colóm.” Octubre 1992

JOAN ANTONI PEREZ I HERRERO

El primer investigador del Colón Valenciano fue el valenciano Joan Antoni Perez Herrero quien impartió una conferencia para presentar su descubrimiento el 29 de Septiembre de 1988 en la sede del GAV en Valenciaq donde anunció la publicación de dus trabajos que verían finalmente la luz en Octubre de 1992. Fue editado en Énova por Queloleny Edicions con ISBN 8488092008 e impreso en Gráfiques Torsán de Valencia.

Tras los estudios de Perez Herrero siguieron las investigaciones, conferencias y trabajos de Juan García Sentandreu, tambien valenciano y actualmente Presidente del Centro de Estudios Colombinos.

En 2012, el expresidente del Centro Colombino de Barcelona adscrito a la entidad independentista catalana Omnium Cuiltural, Francesc Albardaner, publicó un trabajo desdiciéndose de su apuesta por el Colón de Barcelona que venía defendiendo desde 1990 y apuntando, 24 años despues del valenciano Perez i Herrero, que Colón habría nacido en Valencia. El catalán Albardaner defiende como propia y original suya la teoria del “Colón valenciano” sin que realmente sea así como podemos fácilmente comprobar.

2. Juan García Sentandreu “Código Valencia. El Origen de Cristóbal Colón” Octubre 2019

CÓDIGO VALENCIA: EL ORIGEN DE CRISTÓBAL COLÓN

Juan García Sentandreu

Ediciones Nouvalencianisme

Primera  Edición Octubre 2019

Segunda Edición Octubre 2024

Introducción de la Primera Edición

INTRODUCCIÓN

Una investigación liderada por el catedrático José Antonio Lorente, director del Laboratorio de Genética Forense de la Universidad de Granada, junto con varias universidades americanas y europeas, trata de descubrir a través del análisis del ADN el lugar de nacimiento de Cristóbal Colón. Tras corroborar en 2005 que los restos que descansan en la catedral de Sevilla pertenecen al descubridor de América se procedió a tomar muestras de ADN de 255 ciudadanos de apellido “Colom” de Cataluña, Islas Baleares, Comunidad Valenciana y sur de Francia, así como de 113 ciudadanos de apellido “Colombo” en las regiones del norte de Italia. La localización e individualización del cromosoma ‘Y’, junto con el ADN nuclear y el mitocondrial, constituyen los elementos fundamentales para establecer relaciones de parentesco entre los sujetos con apellido “Colom/Colombo/Colón” y con antecedentes generacionales de haber habitado en estos territorios: Génova/Liguria, Cataluña, Baleares, Comunidad Valenciana, y Portugal, para “luego, comparar el material genético con el de Colón”, apunta Lorente.

Las investigaciones antropológicas, genéticas y edafológicas siguen sorprendiendo a los científicos. Y es que la muerte y nacimiento del personaje que descubrió América se ha convertido en un ámbito de estudio para historiadores y científicos. Sin embargo, como ha apuntado el profesor Lorente ”el ADN puede aportar datos para reinterpretar la historia, pero la historia no va a cambiar”.

La explosión nacionalista en Europa a finales del siglo XIX supuso la introducción de diversas interpretaciones de la historia amoldadas a los intereses políticos y el rigor histórico fue sustituido por la fantasía y el romanticismo.  Cataluña sigue liderando en España las teorías más estrafalarias  sobre la “nueva historia” que adjudica el origen y  la catalanidad a cualquier personaje histórico que pueda “encajar” en su versión política.

Llegamos, pues, al estudio del origen de Cristóbal Colón con una clara intencionalidad crítica como lo he hecho en tantos otros aspectos como han sido la burda apropiación catalana del Siglo de Oro de la lengua valenciana, de la propia naturaleza de esta lengua, de los símbolos y denominaciones históricas y de la versión rigurosa de la historia de un condado que pretende rivalizar con los reinos de España con un planteamiento falso e impostado, construido para cimentar una nación que nunca lo fue.

La teoría de la catalanidad de Colón fue planteada originalmente a principios del siglo XX por el peruano Luis Ulloa sin que tuviera acogida efectiva hasta finales del franquismo, momento en que el nacionalismo catalán  se volvía efervescente ante las posibilidades de tornar a la escena pública.

En el seno de Omnium Cultural Catalá se crea en 1991 el Centro de Estudios Colombinos (CEC) dedicado al estudio sobre la supuesta catalanidad de Cristóbal Colón y en el 2007 se crea el Instituto de Nueva Historia como una escisión de la Fundación de Estudios Históricos de Cataluña. Desde el mismo momento de su fundación, el Instituto ha defendido la “nacionalidad catalana” de Cristóbal Colón, Miguel de Cervantes y William Shakespeare, Erasmo de Rotterdam, el Gran Capitán, Ponce de León, Américo Vespuccio, Nicolás Copérnico, Hernán Cortés y Santa Teresa de Jesús.

Es importante resaltar para el lector que toda esta euforia no sólo no ha sido compartida unánimemente por la  historiografía catalana sino que ha sido motivo de enfrentamientos y divisiones entre los que defendían la posición de que Colón era un patricio catalán  de Barcelona y la que empieza a articularse a partir del 2006 con las investigaciones genéticas de la Universidad de Granada y con la colaboración del catalán Centro de Estudios Colombinos en la que la que los datos apuntan –según estos- a que Colón verdaderamente no era de Barcelona sino que era un ciudadano “dels paísos catalans” nacido en Valencia. ¿En Valencia? Ninguno de sus biógrafos coetáneos: ni su hijo Hernando, ni Bartolomé de las Casas, nadie, menciona que Cristóbal Colón estuviera o conociera Valencia.

Y aquí empieza la historia.

3. Juan García Sentandreu “Código Valencia. El Origen de Cristóbal Colón” Septiembre 2024

El origen de Cristóbal Colón CÓDIGO VALENCIA INTRODUCCIÓN a la segunda edición. El “Colón valenciano” surgió por primera vez en una conferencia del valenciano Juan Antonio Perez Herrero el 29 de Septiembre de 1987 en el salón de actos de la sede del Grup d´Accio Valencianista (GAV) de la calle Pintor Gisbert 17 de Valencia. Joaquín Romero, su entonces presidente, presentó al conferenciante que sorprendió a la audiencia con una serie de datos abrumadores en los que planteaba el origen de Cristóbal Colón en una de las localidades ribereñas del río Júcar, próxima a Játiva, ciudad industrial puntera en el arte de la seda en el siglo XV. En esta conferencia, Pérez Herrero anunció la publicación de un trabajo que vería la luz en 1992 coincidiendo con el quinto aniversario de la conquista de América y que fue editado en Énova (Valencia) por Queloleny Edicions con ISBN 84880920081 e impreso en Gráfiques Torsán de Valencia. El GAV fue una de las entidades que, junto con la Federación Coordinadora d´Entitats Culturals del Regne de Valencia, protagonizó las mayores movilizaciones sociales en defenda de la historia y la personalidad valenciana. Fui nombrado presidente del GAV en 1994 hasta 2002 y de la Coordinadora desde 2011.

Ese mismo año 1992, mi maestro en las artes de defensa de lo valenciano, D. Vicente Giner Boira, letrado del Tribunal de las Aguas de Valencia, me llamó para organizar una prospección arqueológica de la tumba del financiero valenciano del siglo XV, Miguel de Santángel, que fue el que proporcionó el dinero a los Reyes Católicos para acometer el viaje colombino. Tuve el honor de redactar el protocolo entre la Madre Abadesa del Monasterio de la Trinidad de Valencia, la Concejala de Cultura, María Dolores García Broch, y la sección de arqueología del Ayuntamiento de Valencia y de coordinar los trabajos de apertura de la cripta en el primer altar lateral del cenobio valenciano, junto a la tumba de la Reina Doña María, esposa de Alfonso el Magnánimo, lugar designado en el testamento por Luis de Santángel para su enterramiento. De los trabajos se dejó constancia en el correspondiente expediente administrativo en el que certifica la presencia de restos de 6 personas que bien pudiere hoy ser objeto de pruebas de ADN con la moderna tecnología que en aquel momento no existía. Los restos fueron depositados en una urna de zinc y se colocó una lápida en el suelo que lee “cripta de los Santángel que ordenó construir para su enterramiento el financiero valenciano Luis de Santángel, escribano de Ración de Fernando II, el Católico. Ayuntamiento de Valencia 1993”.

Diez años después, en 2003, una investigación liderada por el catedrático José Antonio Lorente, director del Laboratorio de Genética Forense de la Universidad de Granada, junto con varias universidades americanas y europeas, trata de descubrir a través del análisis del ADN el lugar de nacimiento de Cristóbal Colón. Tras corroborar en 2005 que los restos que descansan en la catedral de Sevilla pertenecen al descubridor de América se procedió a tomar muestras de ADN de 255 ciudadanos de apellido “Colom” de Cataluña, Islas Baleares, Comunidad Valenciana y sur de Francia, así como de 113 ciudadanos de apellido “Colombo” en las regiones del norte de Italia. La localización e individualización del cromosoma ‘Y’, junto con el ADN nuclear y el mitocondrial, constituyen los elementos fundamentales para establecer relaciones de parentesco entre los sujetos con apellido “Colom/Colombo/Colón” y con antecedentes generacionales de haber habitado en estos territorios: Génova/Liguria, Cataluña, Baleares, Comunidad Valenciana, y Portugal, para “luego, comparar el material genético con el de Colón”, apunta Lorente. Las investigaciones antropológicas, genéticas y edafológicas siguen sorprendiendo a los científicos. Y es que la muerte y nacimiento del personaje que descubrió América se ha convertido en un ámbito de estudio para historiadores y científicos. Sin embargo, como ha apuntado el profesor Lorente “el ADN puede aportar datos para reinterpretar la historia, pero la historia no va a cambiar”.

 Quiero dejar constancia de que he solicitado al catedrático José Antonio Lorente, con el que tengo una correspondencia fluída, de que entre los estudios genéticos pendientes debe de intentarse uno sobre los descendientes actuales perfectamente conocidos, del financiero y Escribano de Aragón, el valenciano converso Luis de Santángel, con la correspondiente toma de muestras de adn ya que por la proximidad empresarial de este con Cristóbal Colón así como por su origen judío, bien podrían compartir datos genéticos entre ambos. O lo que es lo mismo, que Santangel y Colón fueran de la misma familia. La explosión nacionalista en Europa a finales del siglo XIX supuso la introducción de diversas interpretaciones de la historia amoldadas a los intereses políticos y el rigor histórico fue sustituido por la fantasía y el romanticismo. Cataluña sigue liderando en España las teorías más estrafalarias sobre la “nueva historia” que adjudica el origen y la catalanidad a cualquier personaje histórico que pueda “encajar” en su versión política.

Llegamos, pues, al estudio del origen de Cristóbal Colón con una clara intencionalidad crítica como lo he hecho en tantos otros aspectos como han sido la burda apropiación catalana del Siglo de Oro de la lengua valenciana, de la propia naturaleza de esta lengua, de los símbolos y denominaciones históricas y de la versión rigurosa de la historia de un condado que pretende rivalizar con los reinos de España con un planteamiento falso e impostado, construido para cimentar una nación que nunca lo fue. La teoría de la catalanidad de Colón fue planteada originalmente a principios del siglo XX por el peruano Luis Ulloa sin que tuviera acogida efectiva hasta finales del franquismo, momento en que el nacionalismo catalán se volvía efervescente ante las posibilidades de tornar a la escena pública. En el seno de la entidad independentista Omnium Cultural Catalá se crea en 1991 el Centro de Estudios Colombinos (CEC) dedicado al estudio sobre la supuesta catalanidad de Cristóbal Colón y en el 2007 se crea el Instituto de Nueva Historia como una escisión de la Fundación de Estudios Históricos de Cataluña. Desde el mismo momento de su fundación, el Instituto ha defendido la “nacionalidad catalana” de Cristóbal Colón, Miguel de Cervantes y William Shakespeare, Erasmo de Rotterdam, el Gran Capitán, Ponce de León, Américo Vespuccio, Nicolás Copérnico, Hernán Cortés y Santa Teresa de Jesús. Es importante resaltar para el lector que toda esta euforia no sólo no ha sido compartida unánimemente por la historiografía catalana sino que ha sido motivo de enfrentamientos y divisiones entre los que defendían la posición de que Colón era un patricio catalán de Barcelona y la que empieza a articularse a partir del 2006 con las investigaciones genéticas de la Universidad de Granada y con la colaboración del catalán Centro de Estudios Colombinos en la que la que los datos apuntan –según estos- a que Colón verdaderamente no era de Barcelona sino que era un ciudadano “dels països catalans” nacido en Valencia. ¿En Valencia? ¿Dels “països catalans”? Ninguno de sus biógrafos coetáneos: ni su hijo Hernando, ni Bartolomé de las Casas, nadie, menciona que Cristóbal Colón estuviera o conociera Valencia. Y aquí empieza la historia.

 

spaña las teorías más estrafalarias sobre la “nueva historia” que adjudica el origen y la catalanidad a cualquier personaje histórico que pueda “encajar” en su versión política. Llegamos, pues, al estudio del origen de Cristóbal Colón con una clara intencionalidad crítica como lo he hecho en tantos otros aspectos como han sido la burda apropiación catalana del

4. Francesc Albardaner “La catalanitat de Colóm: Ciencia histórica o fanatismo patriotero” 2012

Francesc Albardaner, expresidente del Centro Colómbino  de Omnium Català, tras 22 años defendiendo la teoría de Luis Ulloa de que Colón era de Barcelona, se desentiende de dichas tesis en 2011 y empieza a mirar a Valencia. En su libro “La catalanitat de Colóm: Ciencia histórica o fanatismo patriotero” publicado en el año 2011 y después en una conferencia de 2012 en el Instituto de Estudios Colombinos del que, en aquel momento, era vicepresidente, manifestaba que “Colón era catalán de cultura” apeándose y negando definitivamente la teoría de que Colón fuera un patricio catalán nacido en Barcelona –como había sostenido  durante 20 años hasta ese momento-, y llegando a sostener que “el tema del origen nacional de Colón despierta pasiones patrióticas desatadas que hace defender teorías completamente infundadas”. En clara referencia al nacionalista Jordi Bilbeny, Albardaner dice que ”lamenta las teorías (como la que propone que las naves de Colón zarparon de Pals (Cataluña) en vez de Palos de la Frontera (Huelva) más basadas en fanatismos patrioteros que en argumentos científicos y que acaban haciendo mucho daño”.

La primera teoría  del “Colón  valenciano” no era la de Francesc Albardaner sino del valenciano Pérez Herrero  publicada en 1988 y el mío (2.019). Albardaner ha sido candidato municipal por el Bloc Municipal Catalá en el 2014, organización de marcado cariz independentista y que defiende la creación del “estat  catalá” sobre la base de la absorción en la ahistórica figura “dels països catalans” tanto de la Comunidad Valenciana como de Baleares.  En los textos y conferencias de Albardaner defiende una falsa unidad lingüística entre estos territorios para justificar su cohesión cultural, territorial y política para segregarse la nación española[1].

Dejamos constancia documental de todo ello porque Francesc Albardaner, en una reciente conferencia en Granada dijo literalmente que “el Colón valenciano” era su legado o testamento personal” cuando está más que demostrado que no es así y que el verdadero y original estudioso de Cristóbal Colón en Valencia y de origen valenciano fue el valenciano Juan Antonio Pérez Herrero.